martes, 22 de abril de 2014

La libertad

 Aguilar Rodríguez Illacheni Suri

Es muy difícil plantearnos una idea clara de lo que es la libertad, muchas veces no nos damos cuenta de los privilegios que nosotros gozamos, y que no valoramos, por ejemplo el poder ir a la escuela, existen personas que a pesar de tener el derecho de recibir educación, no la reciben ya sea por falta de recursos. Existen millones de casos en los que los adolescentes dejan sus estudios porque deben obtener dinero para poder adquirir estos productos básicos para poder sobrevivir.
Existen mucha gente en otro países que cuentas con menos recursos que nosotros, a pesar de que México es un país pobre, contamos con muchos servicios que bien o mal facilitan la vida, y nos dan libertad que personas  de otros países no tienen.
En la lectura “El milagro del agua” nos habla claramente sobre el hecho de que la gente en especial las mujeres del país de etiopia no tienen libertad en ese país no cuentan con agua potable, y para poder obtener agua para bañarse, lavar ropa o la comida las mujeres que son las únicas encargadas de conseguir el agua deben caminar de 2 a 10 kilómetros para poder llevar un poco de agua a sus casas.

¿Te imaginas cocinar con el agua con la que te bañaste? ¿No? Pues esto, es lo que pasa en países como Etiopía. Esto es un claro ejemplo de que en países como este las mujeres en este caso ¡NO TIENE LIBERTAD! ¿Pero esto es culpa de quien? Muchas razones nos hacen pensar que atrás de todos estos problemas como la falta de tubería y agua potable para muchas poblaciones es por culpa de algunas personas que se aprovechan del poder que tienen en lugares como estos.
Bien o mal, a mi parecer nadie es totalmente libre, porque todos estamos regidos por leyes del lugar donde vivimos, y de alguna manera debemos respetarlos porque si no podemos ser castigados. Las mujeres de Etiopía tardan casi todo un día entero en ir y regresar con agua y por esta razón deben dejar la escuela porque no les da tiempo de hacer tareas ni de asistir a clases por falta de tiempo.
Esto me hace pensar , y muchas veces sentirme mal porque nosotros que tenemos TODO para poder estudiar e ir a la escuela, sin necesidad de trabajar para comprar útiles escolares, ropa o tener la responsabilidad de mantener una casa o una familia, no aprovechamos la oportunidad que tenemos, que estoy segura las mujeres de Etiopía darían lo que fuera por estar en nuestro lugar.
Nosotros, no podemos bañar diariamente, contamos con la facilidad de con solo abrir una llave y que caiga agua potable y que personas que viven en Etiopía o cuentan con drenaje y a pesar de eso, y de tener que caminar kilómetros bajo el sol, embarazadas, o con el riesgo de ser maridas por las llenas que habitan en esos lugares cuando logran obtener agua, ¡no es potable! está llena de bacterias que enferman a las personas.
Ellas a comparación de nosotros no tienen libertad y nosotros desgraciada o afortunadamente si la tenemos pero no la valoramos, con esto es difícil poder decir si nosotros realmente merecemos gozar de la libertad que tenemos.
Muchas veces nos hemos quedado dormidos, o no entramos a algunas clases uno como estudiante tiene la libertad  de decidir si entramos o no a clases, y muchas veces he tomado la mala decisión de no entrar, y que muchas veces no valoramos la libertad que tenemos de ir o no a la escuela, y al leer el escrito de “El milagro del agua” no podemos dar cuenta que las mujeres de Etiopía quieren estudiar pero ellas a comparación de nosotros no pueden hacerlo porque para estas mujeres su vida es “Escuela o sobrevivir” y pues obviamente deben escoger sobrevivir, y no solo por ellas sino por la familia que les rodea, y no tienen libertad por obvias razones.

Debemos aprender a valorar la libertad que tenemos que aunque nos cuente trabajo, debemos ver si hacemos o no las cosas bien al decidir sobre como manejamos nuestra libertad.

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